En busca de un sabor diferenciador, ¡creamos nuestra mantequilla de almendra!
Cada frasco cuenta la historia de un proceso que transforma simples almendras sin piel, provenientes de la Península Ibérica, en una crema sedosa tan característica de Casca Rija.
Independientemente de la crema que hacemos, nuestro proceso es siempre el mismo y consiste en 3 pasos fundamentales para un resultado que se espera sorprendente en sabor. Son: tostado, selección y transformación de los frutos secos en una crema aterciopelada.
1º - Tostar las almendras es el primer paso y es fundamental para que el sabor final sea delicioso.
2º - La selección manual de las almendras por nuestro equipo, después de enfriadas, sigue siendo un proceso importante al cual no renunciamos, reflejando nuestro compromiso con la calidad.
3º - Transformar las almendras en una mantequilla cremosa y sedosa, característica esencial tanto para sabor como para textura, es la tercera etapa productiva.
El toque final es uno de nuestros secretos revelados: la adición de c.s. de especias exóticas. La suavidad y dulzura de la canela en polvo y la intensidad ligeramente picante del jengibre deshidratado en polvo se unen a la sedosa crema de almendra.
¿El resultado final fue exitoso? ¡Una crema de almendra de paladar aromático y sabor único!